La noticia se ha dado a conocer este lunes por la organización israelí no gubernamental La Paz Ahora, contraria a la colonización de ese régimen.
“Una comisión de la administración militar israelí encargada de Cisjordania ha aprobado recientemente la construcción de 829 viviendas”, informa Lior Amihai, un responsable de la mencionada ONG.
El diario israelí ‘Haaretz’ confirma la información y precisa que los nuevos asentamientos se construirán en las colonias de Givat Zeev, al norte de Al-Quds (Jerusalén Este), Nofei Prat, Givat Salit y Nokdim.
No obstante, la construcción de nuevas viviendas por parte del régimen de Tel Aviv se congeló hace un tiempo por temor a irritar más a la comunidad internacional, que las considera ilegales porque están situadas en los territorios ocupados.
En este contexto, muchos creen que esta decisión es una especie de represalia del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, por el acuerdo que se logró la madrugada del domingo entre Irán y el Grupo 5+1 sobre el programa de energía nuclear del país persa.
Cuando el mundo saludaba este importante, Netanyahu no pudo contener su ira y dijo que “lo que se cerró en Ginebra no es un acuerdo histórico, sino un error histórico”.
El régimen de Israel utiliza la construcción de nuevos asentamientos ilegales en territorios ocupados palestinos como una herramienta para amenazar al mundo cuando algo no le conviene. Si bien no necesita excusas para continuar sus políticas expansionistas y violar sistemáticamente la normativa internacional.
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